Por Laura Serra, 2 marzo 2015
En su último discurso ante la Asamblea Legislativa, la presidenta Cristina Kirchner lanzó ayer una de las embestidas más virulentas contra la Justicia desde que inició su cruzada contra aquellos jueces y fiscales que no le son afines. No sólo los volvió a acusar de integrar un “Partido Judicial”, sino que les achacó haberse “independizado de la Constitución y de las leyes”.
Al inaugurar el 133er. período de sesiones ordinarias del Congreso, la Presidenta criticó también, en duros términos, la denuncia en la que el fiscal fallecido Alberto Nisman la responsabilizó de haber encubierto a los funcionarios israelíes imputados por el atentado a la AMIA, en 1994. “Es un escándalo, un bochorno para los argentinos”, arremetió, tras revelar la existencia de dos escritos en la caja fuerte del fiscal, uno con la consabida denuncia y otro con una solicitud al Gobierno para que requiriera al Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas su apoyo para interrogar a los iraníes acusados.